Organización Mundial de la Salud
Overview: En las décadas recientes, los países de las Américas han fortalecido su capacidad para enfrentar situaciones de emergencias y desastres, sean éstos de origen natural o producto de la actividad humana. El sector salud de muchos países ha desarrollado redes nacionales cuya responsabilidad específica es la gestión de riesgos y la atención de emergencias y desastres. Sin embargo, se requiere ampliar y consolidar esos avances.
Los países de la región enfrentan aún diversos riesgos para la salud pública, agregándose actualmente la posibilidad del uso deliberado de agentes biológicos y químicos. Como respuesta a la solicitud de numerosos países, la Organización Panamericana de la Salud creó un equipo técnico para el tema de bioterrorismo, liderado por el Director Adjunto e integrado por diversas áreas y unidades técnicas de la OPS, en particular Emergencias y Desastres, Enfermedades Transmisibles, Salud Ambiental, Inmunizaciones, Salud Pública Veterinaria e Información Pública, entre otras.
En un escenario de temor, percepción de inseguridad e incertidumbre sobre el agente involucrado, la salud es sólo una parte de todo el contexto y el problema fundamental es la seguridad integral de la población. La responsabilidad esencial del sector salud es detectar y controlar los riesgos para la salud y no distraer sus esfuerzos para determinar si el incidente fue accidental o intencional.
La presente guía es una contribución para los Estados Miembro de habla hispana que pretende ayudar al fortalecimiento de su capacidad para enfrentar las consecuencias a la salud pública del uso deliberado de armas químicas y biológicas. Hoy, más que nunca, los países y las instituciones necesitan recurrir en primer lugar a sus propios recursos colectivos. Sin embargo, los preparativos y la respuesta requerirán también del planeamiento y solidaridad entre varios países, varios sectores y varias disciplinas.